La Espada Medieval

La Espada Medieval

Evolución y datos relevantes de las espadas medievales

 

El tipo spatha permanece extendido durante el periodo de las migraciones y aún en la Edad Media. Las spathas de la era Vendel (Suecia, 550-793) estaban decoradas con motivos germánicos (similares a los de los bracteates – moneda de oro plana, elaborados tras las monedas romanas). La Era Vikinga contempla nuevamente una producción más estandarizada, pero el diseño básico sigue siendo deudor de la spatha.

Solo desde el siglo XI las espadas normandas empiezan a desarrollar los gavilanes o la cruz. Durante las Cruzadas del siglo XII (o XIII) este tipo cruciforme permanece estable, con variaciones que solo afectan a la forma del pomo. Estas espadas estaban diseñadas como armas cortantes, si bien se hicieron comunes puntas efectivas para rebatir las mejoras en la armadura. Las espadas de un solo filo se popularizaron en Asia. La espada coreana Hwandudaedo, derivada de la Dao china, se conoció en el medioevo temprano de los Tres Reinos. La Katana japonesa, cuya producción se documenta aproximadamente en el año 900 deriva también de la Dao.

Baja Edad Media y Renacimiento

 

Nuevos diseños de espada – junto a la mejora de la armadura – se fueron desarrollando a un ritmo cada vez más rápido entre 1300 y 1500, durante el Renacimiento. El principal cambio fue el alargamiento de la empuñadura, que permitía el uso ambidiestro, y una hoja más larga. Este tipo de espada, llamada en su tiempo Langes Schwert (en alemán espada larga) o Spadone, era común hacia 1400, y varios Fechtbücher (libros de esgrima) que se conservan de los siglos XV y XVI ofrecen instrucciones sobre su uso. Otra variante fue la espada especializada en perforar la armadura, del tipo estoque. La espada larga se popularizó por la capacidad de alcance, de corte y empuje, mientras que el estoque lo hizo por su habilidad para alcanzar los huecos entre las placas de la armadura. La empuñadura se envolvía en ocasiones con alambre o piel de animal para ofrecer una mayor sujeción, a la vez que dificultaba la posibilidad de desarme al golpear la mano.

En el siglo XVI, la larga Doppelhänder (hoy llamada Zweihänder (ambos términos germánicos designan el uso de las dos manos) finalizó la tendencia al incremento del tamaño de las espadas (sobre todo por la disminución de las armaduras de placas y el advenimiento de las armas de fuego), y la temprana Edad Moderna vio el retorno a las armas más ligeras, para una sola mano.

La espada fue el arma más personal en este período, la más prestigiosa y la más versátil en el combate cuerpo a cuerpo, pero empezó a declinar su empleo militar debido a que la tecnología cambió la guerra. No obstante, mantuvo un rol principal en la autodefensa civil.

 

¡Comparte!

Facebook
Twitter
WhatsApp

En Oferta

Entradas Relacionadas

Toledo y las Espadas
Historia

Toledo y las Espadas

Es, sin sospecha, Toledo la capital de las espadas y cuchillería por excelencia. Hablar del forjado y templado de hojas, cuchillos, cortaplumas, armaduras, escudos, etc es sinónimo de Toledo, un Toledo de calidad.

Leer Más »
Historia de la Espada
Historia

Historia de la Espada

Las primeras espadas se elaboraban con cobre, después apreciaron la mayor resistencia del bronce ya en época de los egipcios y de Micenas. Con la aparición del hierro, este será el metal elegido para todo tipo de herramientas de guerra hasta llegado el siglo XX que se forjará en acero carbono y más tarde en acero inoxidable.

Leer Más »
La Espada Medieval
Historia

La Espada Medieval

Solo desde el siglo XI las espadas normandas empiezan a desarrollar los gavilanes o la cruz. Durante las Cruzadas del siglo XII (o XIII) este tipo cruciforme permanece estable, con variaciones que solo afectan a la forma del pomo. Estas espadas estaban diseñadas como armas cortantes, si bien se hicieron comunes puntas efectivas para rebatir las mejoras en la armadura.

Leer Más »
Carrito de compra
Scroll al inicio